La granada ( Punica granatum ) es una punicácea originaria de una vasta zona cercana a la India, Pakistán y China, alrededor del Himalaya, pero desde la antigüedad el hombre la ha cultivado, lo que le permite adaptarse a los países de Asia Central, al Irán está presente y, a través del comercio de los pueblos mediterráneos, el sur de Europa, el Cáucaso y el norte de África.
Es un árbol con una tendencia a desarrollarse de forma arbustiva, que rara vez toca diez metros. En mayo comienza a florecer, con espléndidas flores rojas brillantes, a partir de las cuales se desarrollarán posteriormente las ondas globulares, también rojas, a excepción de algunas variedades de crema o negras. Ama la luz del sol, la lluvia de primavera y no le gustan los inviernos cálidos.
La fruta y sus propiedades.
Ya en octubre, la planta da fruto, dando a nuestras mesas granadas, una baya balausta definida botánicamente, que es rica en semillas rodeadas de arilos rojos y jugosos.
Con un sabor que puede variar pero que es muy dulce o bastante ácido, la granada es una fuente perfecta de vitamina K y una fuente rica de vitaminas B y ácido ascórbico .
Tiene un alto potencial antioxidante, antibacteriano y cardioprotector gracias a los numerosos taninos típicos de la especie y al ácido ascórbico. Por lo tanto, se recomienda para problemas de circulación, para fortalecer todo el sistema cardiovascular, como antienvejecimiento de tejidos y células y antibacteriano en caso de enfermedades estacionales, especialmente las de invierno.
Como consumirlo
La mejor forma de consumir la granada sigue siendo comerla fresca, cortando la parte apical y abriéndola en secciones sin cortar los arilos, perdiendo el jugo y provocando procesos oxidativos.
Los arilos rojos se pueden usar para aderezar ensaladas y ensaladas de frutas, o para complementar los desayunos a base de muesli o cereales, o para producir jugos filtrados, centrifugados o extraídos .
curiosidad
El nombre Punica significa literalmente "cartaginés", ya que los latinos conocían el fruto a través de sus rivales históricos. También hay variedades menos conocidas que tienen frutas enanas, o verdes, amarillas o negras, o con flores blancas o rosadas.
La granada es un símbolo recurrente en muchas culturas: para los judíos, zoroastrianos, hindúes, musulmanes, cristianos y para muchas corrientes paganas, el fruto de la granada alude a la plenitud del espíritu, al amor espiritual, a la abundancia, La prosperidad y la fertilidad.